El síndrome de Asperger en los niños
El síndrome de Asperger es un trastorno del desarrollo que forma parte de los trastornos del espectro del autismo (TEA), como la clasificación más leve. En líneas generales, se caracteriza por dificultades en la interacción social, patrones de comportamiento repetitivos, preferencia por las rutinas, el detallismo y una intensa concentración en intereses específicos.
A diferencia de otros trastornos del espectro autista, las personas con síndrome de Asperger generalmente no tienen retraso en el desarrollo del lenguaje o las habilidades cognitivas. De hecho, suelen ser considerados recursos muy valiosos por las empresas de sistemas y tecnología informática.
Las distancias en el plano de la comunicación social y el lenguaje se visibilizan ante la dificultad para entender el lenguaje no literal (chistes, metáforas, refranes, etc.), responder empáticamente a las emociones de los demás y la falta de entendimiento de las expresiones faciales.
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No hay estudios que reflejen cifras exactas en la Argentina, pero se considera que el síndrome de Asperger afecta de 3 a 7 personas por cada 1000 en todo el mundo. Siempre se lo consideró más frecuente en el sexo masculino que en el femenino (4:1), pero esta creencia está cambiando. En esta nota: cómo se detecta el síndrome de Asperger en los niños.
Cómo se detecta el síndrome de Asperger en los niños
El síndrome de Asperger fue descrito por primera vez en 1944 por el pediatra austriaco Hans Asperger. En su trabajo, Asperger observó a un grupo de niños que mostraban dificultades en la interacción social, falta de empatía, comportamientos repetitivos y un interés intenso en temas específicos, a pesar de tener un desarrollo cognitivo y del lenguaje normal.
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Pero fue varias década después cuando la psiquiatra británica, Lorna Wing, popularizó el término «síndrome de Asperger» en un artículo publicado en 1981. Este artículo ayudó a que el síndrome de Asperger fuera reconocido como un diagnóstico distinto en las siguientes décadas.
El cuadro clínico del Asperger aparece como una influencia de múltiples factores, incluyendo el genético, pero en la mayoría de los casos aún no se ha logrado identificar una única causa.
Algunas características comunes del síndrome de Asperger en los niños son:
- Dificultades en la interacción social. Usualmente tienen dificultades para hacer amigos o muestran poco interés en las interacciones sociales. Los niños con Asperger pueden tener dificultades para entender las normas sociales, captar el lenguaje corporal o las expresiones faciales y pueden parecer socialmente incómodos o retraídos. Una de sus características es la literalidad. Les cuesta interpretar los chistes, la ironía o entender el doble sentido. Esto, a menudo, los hace un blanco para el bullying.
- Habilidades verbales avanzadas y comunicación. Tienen un vocabulario amplio y pueden hablar de manera muy formal o académica para su edad. Muestran patrones de habla inusuales, por ejemplo, un estilo de hablar muy formal o monótono.
- Intereses restringidos. Pueden verse muy obsesionados por un tema u objeto e ignorar todo lo demás. Además, dichos temas pueden ser habituales, como trenes, dinosaurios o computadoras; o atípicos e inusuales, como horarios de trenes, tipos específicos de insectos, sistemas de clasificación o patrones de números.
- Intensidad. El interés es extremadamente profundo y detallado. Pueden memorizar grandes cantidades de información sobre el tema y hablar sobre él con un nivel de detalle que puede parecer excesivo para los demás.
- Comportamientos repetitivos. Pueden mostrar comportamientos repetitivos o adherirse estrictamente a rutinas.
- Preferencia por la rutina. Los imprevistos, como un cambio repentino en los planes, una interrupción en la rutina diaria o una situación inesperada, pueden resultarles especialmente difíciles de manejar. Esto puede llevar a reacciones emocionales intensas, como frustración, ansiedad o, incluso, conductas desafiantes.
- Dificultades en la comunicación no verbal. Pueden tener problemas para entender o usar el lenguaje corporal, gestos, o el contacto visual de manera típica.
Desde el sitio español ser Padres también agregan “Alteraciones en el control emocional: otro de los síntomas más frecuentes del síndrome de Asperger en la infancia son las dificultades para regular las emociones. Los niños con este trastorno suelen manifestar más rabietas que el resto de sus coetáneos y lloran con facilidad. Además, no suelen ser muy empáticos, lo cual se debe a que les cuesta reconocer los sentimientos de quienes les rodean.”
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Al ser una entidad relativamente reciente, muchos casos no están diagnosticados o reciben un diagnóstico equivocado. Este síndrome se asemeja a otros, lo que dificulta su diagnóstico. Algunas personas reciben su diagnóstico de pequeños, mientras que otros pueden hacerlo durante la adolescencia o la adultez.
La detección y diagnóstico del síndrome de Asperger en niños implica un proceso de evaluación que suele incluir observaciones, entrevistas y pruebas específicas dirigidas por un equipo multidisciplinario de psicólogos, neurólogos, pediatras y terapeutas del habla.
Fuente: https://www.clarin.com/internacional/detecta-sindrome-asperger-ninos-especialistas_0_lwOfvMrNbl.html
