Promulgan la ley antimicrobiana
Lo notició la titular de la cartera sanitaria Carla Vizzotti, durante una reunión con representantes de todas las jurisdicciones en el Cofesa, que sesionó en el Centro Cultural Kirchner. La ley «tiene que llegar a cada rincón del país», sostuvo la funcionaria nacional.
La ministra de Salud, Carla Vizzotti, señaló este martes que la ley de Prevención y Control de la Resistencia Antimicrobiana cuya promulgación anunció ante el Consejo Federal de Salud (Cofesa), es «una herramienta potente» para evitar el rechazo de los microrganismos patógenos que causan las enfermedades al efecto de los medicamentos que se utilizan para combatirlos.
Es necesario que llegue «a cada rincón del país» la aplicación de la nueva ley, enfatizó Vizzotti durante la reunión con representantes de todas las jurisdicciones en el Cofesa que sesionó en el Centro Cultural Kirchner (CCK).
La ley «tiene que llegar a cada rincón del país, tanto desde lo que significa un hospital de alta complejidad, un centro de salud, en la atención primaria, en el Remediar y también en las farmacias», sostuvo la ministra durante la presentación.
A su vez, Vizzotti indicó que es necesario «avanzar fuertemente con el plan provincial» de cada jurisdicción, para «empezar a trabajar muy fuerte en la reglamentación y la implementación».
Y añadió que si bien «el desafío es enorme, tenemos una herramienta potente«.
Qué es la Resistencia Antimicrobiana
La Resistencia Antimicrobiana se produce cuando los microrganismos patógenos (virus, hongos, parásitos, pero principalmente bacterias) que causan enfermedades se vuelven resistentes a los medicamentos que los combaten.
Se trata de una problemática global y se estima que para el año 2050 puede constituirse en la primera causa de muerte a nivel mundial.
El uso de antibióticos en cualquier circunstancia puede promover el desarrollo de resistencia, por eso una de las principales estrategias para limitar y contener esta problemática es la restricción del uso de antimicrobianos a las situaciones en las que sean imprescindibles o insustituibles.
Por su parte, la infectóloga Laura Barcelona, coordinadora del Programa de Uso Apropiado de Antimicrobianos del Ministerio de Salud de la Nación, explicó a Télam que en la resistencia antimicrobiana «están interrelacionado todos los mundos de lo que es sanidad animal, sanidad humana, medio ambiente y alimentos. La problemática lo refleja muy globalmente y la solución también tiene que venir así, porque está bastante oculta».
«La realidad es que la gente no sabe que automedicarse con antibióticos está mal y que las infecciones virales no se curan con antibióticos, todo lo contrario, ya que daño a mi flora intestinal», aseveró la especialista.
A su vez, hizo hincapié en que se debe «educar a todos los rangos del personal de salud en que sean muy concienzudos a la hora de indicar antibióticos, y esto debe hacerse solamente cuando estemos realmente frente a una infección bacteriana, porque la mayor parte de las infecciones de la comunidad son todas virales. Tenemos que hacer un cambio de cultura».
Cómo ayudará la nueva ley
De este modo, Barcelona destacó que la ley buscará la prevención de las infecciones a través del «consumo apropiado, adecuado y consciente de antimicrobianos, tanto en salud humana como en salud animal».
Uno de los principales aspectos que destacó la especialista fue que la venta de antibióticos incluirá «siempre receta archivada, en la que debe constar el diagnóstico», ya que «es muy importante para hacer un seguimiento, y hay que trabajar en la fiscalización».
Asimismo, quedan «totalmente prohibidas todas las promociones en medios masivos de lo que es venta de antimicrobianos, salvo las que tengan actividad tópica, pero lo que tenga actividad sistémica, que es lo que impacta en resistencia, queda prohibido», sostuvo.
En tanto, explicó que «estamos trabajando para que en unos meses todas las cajas de antimicrobianos tengan la duración exacta de lo que son los tratamientos, porque hay un problema que las cajas vienen o con tres comprimidos con 15. Y el paciente necesita siete, entonces, o toma el tratamiento inadecuado y eso promueve la resistencia porque el paciente recae, o le sobran comprimidos y promueve la automedicación. Entonces el tratamiento si son siete, la caja tiene que tener siete», subrayó la especialista.
La ley, aprobada el 10 de agosto, requiere de la supervisión de las infecciones asociadas a los cuidados de salud, hospitales y terapias intensivas y prevé la generación de un plan nacional de control de enfermedades producidas por agentes resistentes.
Asimismo, está previsto que las cajitas de los medicamentos lleven impresa la leyenda «Este medicamento puede producir resistencia antimicrobiana».
La iniciativa también refiere a la salud animal y como factor de crecimiento de la industria avícola y ganadera.
Se prevé, en ese sentido, la creación de una comisión nacional interministerial entre las carteras de Salud y de Agricultura, para establecer «límites y una reducción de los factores de crecimiento como antimicrobianos y un listado de esos productos que sólo podrán usarse en la salud humana como únicas alternativas terapéuticas ante ciertas bacterias».
Finalmente, aunque no prohíbe la entrega de las denominadas «muestras gratis», exige una prescripción y por una cantidad que cubra todo el tratamiento.
Fuente: Télam