Bebidas energéticas con ‘cocaína rosa’

 La mezcla de drogas es siempre un riesgo y todavía más entre los menores de 18 años.  Además, tanto las bebidas energéticas como otras sustancias legales e ilegales son más peligrosas cuando los órganos del cuerpo están en pleno desarrollo.

Bebidas energéticas
  1. María Sánchez-Monge

La muerte de un adolescente de 14 años en Getafe (Madrid) tras haber ingerido una bebida energética a la que supuestamente se añadió la droga conocida como cocaína rosa2C-Btucibí o tusi ha sido recibida con conmoción y sorpresa por la sociedad, pero no resulta algo tan extraño para los expertos en toxicología. El consumo de ambos tipos de sustancias por separado presenta diversos riesgos. Y juntas, todavía más. 

La popularidad de las bebidas ricas en sustancias estimulantes como la cafeína, el ginseng o la taurina entre los más jóvenes es ampliamente conocida. De hecho, Galicia ha sido pionera en elaborar una ley para evitar el consumo de bebidas energéticas en menores de 18 años y varias comunidades autónomas seguirán su iniciativa. Hay países que ya han prohibido estos productos en menores.

Efectos y riesgos de las bebidas energéticas

Guillermo Burillo, catedrático de Urgencias de la Universidad Europea de Canarias, advierte que todavía “no se sabe qué droga consumió” el menor porque es muy habitual que las pastillas, envases o sobres que se adquieren en la calle contengan sustancias que no tienen nada que ver con lo que supuestamente ha adquirido el consumidor. “Puede haber tomado cualquier cosa”, recalca. “Hasta que no se realice el análisis forense no se sabrá”.

Aclarado este punto, el experto en toxicología recuerda que las bebidas energéticas, incluso cuando no se mezclan con alcohol y otras sustancias, se han relacionado con arritmias y crisis epilépticas, entre otros riesgos. En la mayoría de los casos no producen problemas, pero cuando las toma “una persona que es susceptible a sus efectos secundarios” pueden tener efectos letales. “Ha habido varias muertes por consumo de cafeína”, indica, aunque matiza que “no son muchas si se tiene en cuenta el volumen de consumo de este tipo de bebidas”. Sucede algo parecido con el cannabis: “A la mayoría de las personas no les pasa nada, pero hay un grupo que padecen psicosis agudas y se quedan con una psicosis permanente”. 

Según los diversos estudios, el consumo de más de 60 miligramos de cafeína en adolescentes de 11 a 17 años (unos 200 mililitros de bebida energética con 32 mg de cafeína/100 ml) puede provocar alteraciones del sueño. A partir de 160 miligramos de cafeína (500 mililitros de una bebida energética con 32 mg de cafeína/100 ml) pueden apreciarse efectos adversos en múltiples esferas, entre las que destacan las alteraciones del comportamiento y los trastornos cardiovasculares.

Efectos y riesgos de la ‘cocaína rosa’

En cuanto a la cocaína rosa, el urgenciólogo señala que “produce una sensación disociativa, un viaje psicodélico que puede llevar incluso a que alguien se precipite desde un edificio”. Los malos viajes que propician este tipo de sustancias pueden ser, “dependiendo de la dosis y de la susceptibilidad personal, muy peligrosos”, confirma el experto. “Pueden producir cuadros de pánico”.

Estos son los principales efectos adversos y peligros de la cocaína rosa:

También hay que tener en cuenta que tanto esta droga como el cannabis, el alcohol y, en general, todas las sustancias tóxicas, pueden, en palabras de Burillo, “tener efectos terribles” cuando se consumen en la adolescencia, un periodo en el que el cerebro está en pleno desarrollo, pero también son especialmente vulnerables el corazón, el hígado, los riñones… 

Burillo pertenece a un grupo de investigación de la Sociedad Española de Urgencias y Emergencias (Semes) que está intentando conseguir financiación para poder detectar las drogas del tipo de la cocaína rosa y otras sustancias distintas a las más habituales (cannabiscocaínaheroína…) porque “la mayoría no se detectan en las urgencias hospitalarias”. Solo se confirma su presencia en los laboratorios forenses.

La mezcla de drogas, una práctica habitual

“La mezcla de drogas, que es habitual en gente joven, es muy peligrosa”, subraya Burillo. “Hasta el 60% de los pacientes que vemos en urgencias han mezclado sustancias”. Esas combinaciones pueden ser muy diversas: alcohol, bebidas energéticas, drogas ilegales, etc.