Efectos sanadores de la música
Los efectos reales de la música para sanar enfermedades: ¿funciona de verdad?
La música, por sí sola, no puede «curar» enfermedades en el sentido tradicional, pero sí tiene un papel poderoso como herramienta complementaria, que ha cobrado mayor interés en los últimos años. Hablamos con una experta para conocer sus efectos y en qué tipo de pacientes y condiciones puede ser más útil.
La capacidad de la música para inducir estados de relajación y de alivio emocional la convierte en una aliada importante dentro de los programas terapéuticos, explica Marisa Valiente, médica de familia y coordinadora del Grupo Salud Basada en Emociones, de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC) si bien es necesario dejar claro que no reemplaza en ningún caso la intervención médica.
En los últimos años ha surgido gran interés en utilizar la música como herramienta terapéutica. Y es que se ha observado que escuchar música puede:
- · Reducir la presión arterial.
- · Disminuir la frecuencia cardíaca y
- · Mejorar la calidad de vida en pacientes con enfermedades crónicas como el cáncer o enfermedades neurodegenerativas.
Mecanismo de acción
El poder de la música reside en su capacidad para activar múltiples áreas del cerebro simultáneamente, explica Marisa Valiente, que además de médica de familia es couch especializada en inteligencia emocional.
Escuchar música placentera activa una red compleja interconectada de regiones tanto corticales como subcorticales, que incluyen el estriado ventral, núcleo acumbens (NAc), amígdala, ínsula, hipocampo, hipotálamo, área tegmental ventral (ATV), cíngulo anterior, corteza órbito-frontal y prefrontal ventral medial, según explica esta médica de familia, couch y experta en inteligencia emocional.
El área tegmental ventral produce dopamina y tiene conexiones directas a estructuras como locus ceruleus (LC), amígdala, hipocampo, cíngulo anterior y corteza prefrontal.
Las respuestas del área tegmental ventral y núcleo acumbens se relacionan con la supresión de estímulos aversivos y al dolor, lo que da cuenta del efecto beneficioso de la música en el manejo del estrés, mientras el locus ceruleus y el hipotálamo regulan la alerta, detalla la doctora Valiente. Así, en conjunto, el sistema dopaminérgico interviene en:
- · La regulación de la alerta
- · Las emociones
- · La recompensa
- · La motivación
- · La memoria
- · La atención
- · Las funciones ejecutivas.
Además, la música tiene un efecto modulador sobre el sistema nervioso autónomo, lo que puede reducir el estrés fisiológico al disminuir los niveles de cortisol.
Qué se entiende por musicoterapia
Se define la musicoterapia, según la American Music Therapy Association (AMTA, 2003), como: “la utilización de la música y todo tipo de experiencias musicales para restaurar, mantener y/o mejorar la salud física y psíquica de las personas. Es decir, la aplicación sistemática de la música, dirigida por un profesional en un entorno terapéutico, a fin de promover cambios deseables en el funcionamiento físico, cognitivo, psicológico o social de personas con problemas educativos o de salud.”
Esta intervención puede incluir:
- Escuchar música.
- Crear música
- Cantar o
- Moverse al ritmo de la música.
Y se adapta a las necesidades específicas de cada paciente.
Aplicaciones de la musicoterapia
En los últimos años ha surgido gran interés en utilizar la música como herramienta terapéutica en la rehabilitación neurológica, explica la doctora Marisa Valiente, y así, por ejemplo se ha usado musicoterapia:
- Niños y adolescentes que padecen de autismo y dislexia.
- Adultos y adultos mayores afectados de enfermedad vascular cerebral, enfermedad de Parkinson, demencias y epilepsias.
Existen numerosos estudios que respaldan el uso de la música como una herramienta terapéutica complementaria, señala esta especialista. En una revisión sistemática de 14 artículos (10 revisiones sistemáticas y 4 ECA) se pone de manifiesto que un buen uso de la música produce efectos positivos en los pacientes. En concreto:
- En pacientes hospitalizados: reduce ansiedad y mejora estado de ánimo.
- En pacientes sometidos a procedimientos invasivos reduce la necesidad de sedación y analgesia. Escuchar música puede tener un efecto beneficioso sobre la ansiedad preoperatoria.
- En pacientes con cáncer: la música es efectiva para aliviar el dolor, la ansiedad y mejora los resultados psicológicos.
- En pacientes con depresión, la musicoterapia es aceptada y está asociada con mejoras en el estado de ánimo, aunque se necesitan ensayos futuros basados en un diseño adecuado y muestras más grandes de niños y adolescentes. Además, las intervenciones terapéuticas con música pueden usarse en pacientes institucionalizados con demencia, para mejorar los síntomas depresivos.
- En pacientes con lesión cerebral adquirida: la musicoterapia puede ser beneficiosa para la marcha, los resultados de la comunicación y la calidad de vida después del accidente cerebrovascular. Estos hallazgos son alentadores, pero se necesitan más ensayos controlados aleatorios de alta calidad en todos los resultados antes de poder formular recomendaciones para la práctica clínica.
- En pacientes con trastorno del espectro autista (TEA) la musicoterapia puede ayudar a los niños con TEA a mejorar sus capacidades en áreas importantes como la interacción social y la comunicación, también puede contribuir a aumentar las capacidades de adaptación social y a promover la calidad de las relaciones entre padres e hijos.
- Existe evidencia en estudios en sujetos sanos, que escuchar música que les sea agradable, puede mejorar transitoriamente el desempeño en pruebas de habilidades temporo-espaciales, de atención, fluencia verbal y creatividad.
- La música tiene un efecto bien documentado en aliviar ansiedad, depresión y el dolor en enfermedades somáticas. Las respuestas que dispara la música en estructuras del circuito dopaminérgico como el área tegmental ventral y el núcleo acumbens, sugieren que la música reduce el dolor al aliviar la ansiedad y distraer la atención de estímulos aversivos, ayudando a sobrellevar así el estrés emocional.
Referencias Bibliográficas
- Estaún Ferrer S, Cladellas Pros R. Música como reductor de ansiedad: Un estudio piloto. Ansiedad y estrés. Vol. 26 (2020) 46-51
- Miranda M, Hazard S, Miranda P. La música como una herramienta terapéutica en medicina. RevChil Neuro-Psiquiat 2017; 55 (4): 266-277
- Sequera-Martín M, Miranda-Pereda C, Massegú-Serra C, Pablos-Hernandez C, GonzalezRam, A. Musicoterapia en la demencia del paciente anciano: fundamentos, aplicaciones y evidencia científi ca actual. Psicogeriatría 2015; 5 (3): 93-100