El colchón perfecto para evitar el dolor de espalda
Antes de decantarse por un colchón, son varias las preguntas que hay que hacerse, como el peso y la estatura o la postura habitual para dormir. Consultar estas y otras dudas con un experto es el primer paso.
Aunque pueda parecerlo, elegir un buen colchón no es ninguna tontería si se tiene en cuenta que una buena parte de la vida la pasamos durmiendo. Para tomar la decisión, son varios los factores que hay que considerar, como el material. A pesar de que los colchones de muelles han gozado de gran popularidad en cuanto a su calidad, lo cierto es que los de espuma no tienen nada que envidiarle, según concluye el último análisis de colchones de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). El estudio aclara que los modelos de muelles suelen incluir también varias capas de espuma. “No obstante, estos últimos suelen ser más frescos por el efecto de ventilación del aire interior”, se indica.
Desde la Asociación Española de la Cama (Asocama), recuerdan que a la hora de elegir colchón es clave ir a probarlo a un punto de venta especializado y dejarse asesorar por los expertos. “Por supuesto, es necesario valorar el I+D detrás de cada tecnología, pero, en realidad, lo que debemos buscar son los beneficios y prestaciones, más que centrar la búsqueda en componentes concretos que harán complicado encontrar el colchón perfecto. Nuestra espalda no conoce de componentes, sino de confort, de sentirse bien y de descansar profundamente”, señalan.
Respecto a la firmeza buscada, aclaran dos puntos:
- Cuanto mayor es el peso, mayor debe ser la dureza del colchón. En caso de pesar menos, se pueden buscar alternativas más suaves.
- Un colchón demasiado blando puede perjudicar la salud de la columna.
Por su parte, el Colegio Oficial de Fisioterapeutas de la Comunidad Valenciana (ICOFCV) subraya que para mejorar el descanso “se recomiendan colchones en los que el 25% de la parte superior sea dos veces más suave que el 75% inferior restante, permitiendo que los huesos más protuberantes del cuerpo se acomoden al colchón, liberando presiones en tejido blando, pero también que la columna se mantenga alineada con la cabeza y las piernas en la base más firme”.
Asimismo, los fisioterapeutas valencianos recomiendan elegir colchones de firmeza media si el índice de masa corporal (IMC) está por encima de 27, y de firmeza baja, si el IMC está por debajo de 23.
Qué preguntarte antes de elegir colchón
Antes poner en marcha la búsqueda, Asocama plantea las siguientes cuestiones para que el experto pueda asesorar correctamente:
- Peso y estatura de la o las personas que duerman habitualmente en el colchón buscado.
- Postura a la hora de descansar.
- Tipo de confort deseado: suave, medio o firme.
- Medida del colchón.
- Preferencias particulares: ser más o menos caluroso, utilizarse en una zona cálida o húmeda…
Acerca de la postura que se adopta al dormir, los expertos de ICOFCV aconsejan una posición corporal horizontal. Eso sí, continúan, “existen algunas excepciones a tener en cuenta pues, en el caso de aquellas personas con problemas cardiovasculares, deberán optar por elevar la cabeza o las piernas para dormir si el médico lo prescribe”. Para aquellos con reflujo, es conveniente que descansen con unos pocos grados de inclinación, elevando las patas del cabecero de la cama o durmiendo en posición decúbito lateral sobre su lado izquierdo.