Golpes y lesiones en los niños: cuando consultar al médico
Un esguince o una caída pueden ser más serios de lo que parecen. Una doctora del Hospital Pediátrico de Los Ángeles detalla en qué casos se recomienda la intervención de un profesional de la salud
Un esguince en el campo de fútbol. Una caída al suelo de la casa. Los niños se lesionan, pero como padre, ¿cuándo es el momento adecuado para llevarlos al médico o a la sala de emergencias? La Dra. Bianca Edison, médica ortopédica y especialista en medicina deportiva pediátrica del Hospital Pediátrico de Los Ángeles, ofrece orientación para las mamás y los papás preocupados.
En primer lugar, dijo, no asuma que las lesiones infantiles rara vez son graves: la doctora Edison apuntó a las estadísticas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU., que muestra que casi la mitad (un 45 por ciento) de las lesiones en los parques infantiles implican fracturas, dislocaciones, conmociones cerebrales y otros daños lo suficientemente graves como para necesitar atención médica urgente. Dividió las lesiones infantiles en cuatro tipos: lesiones en la cabeza, lesiones en la boca y los dientes, fracturas y lesiones oculares.
Lesiones en la cabeza
Un golpe en la cabeza no es algo poco común para los niños revoltosos. Sin embargo, ciertos síntomas pueden indicar que se necesita más que un abrazo para ayudar a su hijo.
Las fracturas pueden tener complicaciones peligrosas. Identificar los síntomas críticos y abordar de inmediato asegura el bienestar infantil y evita riesgos mayores
“Estos síntomas incluyen irritabilidad severa más allá de lo que el niño muestra normalmente, múltiples episodios de vómitos, dificultad para hablar, diferentes tamaños de pupilas y un cambio arrepentido en la forma en que el niño camina”, según Edison.
“Estos síntomas son muy preocupantes y requieren atención médica inmediata”, agregó. Hay ciertas métricas que también pueden ayudar, especialmente cuando se trata de lesiones en la cabeza relacionadas con caídas. Si el niño tiene menos de 2 años y cae más de 3 pies (90 centímetros), o tiene más de 2 años y cae más de 5 pies (1,5 metros), es necesario ir a la sala de emergencias, dijo el médico de Los Ángeles .
Ciertamente, si siente alguna abolladura o depresión en la cabeza de su hijo, llévelo a la atención médica inmediata, añadió Edison. Eso podría apuntar a una fractura de cráneo.
Cualquier hematoma en o alrededor de los ojos es otra señal de alerta, al igual que la sangre que drena de la nariz o las orejas.
Conocer los signos críticos ayuda a distinguir entre incidentes menores y los que requieren intervención médica (Imagen Ilustrativa Infobae)
Una vez que esté en el hospital, es posible que requiera se una tomografía computarizada si se presenta alguno de estos síntomas o eventos:
- Pérdida de conciencia
- Agitación
- Somnolencia extrema o respuesta significativamente lenta
- Dolor de cabeza intenso que empeora
- Un accidente automovilístico que expulsó al niño del vehículo o un accidente de bicicleta en el que el niño no llevaba casco.
- Episodios de vómitos múltiples o cualquier actividad de tipo convulsivo.
“Estos síntomas o situaciones indican que podrían producir un aumento de la presión en el cerebro, aumento del cerebro o sangrado real en el cerebro “, explicó Edison.
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Lesiones oculares
Existen señales claras de advertencia de que se necesita atención de emergencia cuando un niño se lesiona el ojo
- Hemorragias nasales que ocurren junto con un ojo morado o sangrado en la parte blanca del ojo
- Lesiones en la cabeza que resultan en ojos morados
- Una fractura o depresión en los huesos orbitales que rodean la zona ocular
- Problemas de visión repentinos y/o persistentes, que incluyen visión doble, visión borrosa o dificultad para mover los ojos.
“Pídele al niño que siga tu dedo”, instruyó Edison. “Si un ojo lo sigue y el otro ojo permanece recto, o si hay dolor con el movimiento de uno de los ojos, puede haber un trauma más significativo en el ojo lesionado, o puede haber una infección en su interior”.
Lesiones en la boca o los dientes
Los niños muy pequeños que todavía están aprendiendo a caminar pueden, en ocasiones, caerse y dañarse la boca o los dientes. Si eso significa que un niño pierde un diente primario (“de leche”), por lo general no se trata de una emergencia, dijo Edison, aunque se justifica que el niño vea a un dentista durante las próximas 24 horas.
Sin embargo, para los niños mayores, cualquier lesión en un diente permanente es una emergencia dental. Si el niño pierde un diente, asegúrese de recuperarlo, lávelo con solución salina o agua tibia, asegurándose de sujetar el diente por su corona, no por su raíz. Después de que el diente se haya enjuagado adecuadamente, puede volver a implantarlo usted mismo, asegurándose de haberlo colocado correctamente en la boca de su hijo, dijo Edison. Sostenga el diente en su lugar con una servilleta húmeda o una toalla de papel.
“Debe hacerlo dentro de los cinco a 20 minutos posteriores a la caída del diente para que las raíces del diente no mueran”, añadió. Un adulto siempre debe sostener el diente en su lugar con una servilleta húmeda o una toalla de papel. No permita que su hijo haga esto por sí mismo, porque es posible que no mantenga el diente quieto o que el diente se afloje de la mandíbula y represente un peligro de asfixia. Si reimplantar el diente es difícil, o si faltan varios dientes, busque atención dental de emergencia. “Se debe tener en cuenta todos los dientes faltantes”, dijo Edison, “y se debe hacer un seguimiento con el dentista de su hijo para asegurarse de que no haya una lesión subyacente”.
Un golpe puede no parecer gran cosa, pero saber cuándo una herida bucal necesita visita urgente al dentista es vital para la salud dental de tu hijo (Imagen Ilustrativa Infobae)
Fracturas
Las fracturas son comunes cuando los niños se divierten en actividades como andar en patineta, fútbol, trepar árboles: Los niños encuentran muchas formas diferentes de fracturarse un hueso. Pero la causa más común de fracturas es una simple caída de una cama, un cambiador o un sofá por parte de un bebé o un niño pequeño, escribió Edison. “Todo lo que se necesita es el ángulo correcto y la fuerza correcta en el hueso para que ocurra una fractura”, dijo.
Para los bebés y niños pequeños, los sitios de fractura más comunes son el codo, la muñeca, la clavícula, la parte inferior de la pierna y el dedo. Las fracturas suelen mostrar características clave, como hinchazón inmediata en el lugar de la lesión, deformidad y renuencia de su hijo a utilizar la parte del cuerpo lesionada. Por ejemplo, pueden mantener el brazo fracturado cerca de su cuerpo, o “favorecer” una pierna o un pie y no poner peso sobre ellos. Cualquier fractura requiere la atención inmediata de un médico.
Busque una de estas “5 P”, por sus siglas en ingés, cada una de las cuales justifica llevar a un niño a la sala de emergencias:
- Dolor (Pain, en inglés) con presencia de malestar extremo y sensibilidad,
- Palidez (apariencia pálida poco saludable de la piel),
- Pulso (débil o no detectable),
- Parestesia (entumecimiento u hormigueo),
- Parálisis (incapacidad para mover la parte del cuerpo lesionada).
Asegúrese de que su hijo sea llevado a un centro con tecnologías de exploración, como los rayos X. Conocer los consejos anteriores puede ayudar a las mamás y los papás a reaccionar rápida y eficazmente cuando ocurren lesiones. “Los niños son activos y curiosos, y se producirán lesiones, independientemente de cuántas precauciones de seguridad se establezcan”, dijo Edison en un comunicado de prensa del hospital. “Por eso es importante saber qué hacer cuando algo sucede”.
