Hábitos para fortalecer el cerebro

Nuevos hábitos que ejercitan el cerebro (Foto: Pixabay)

Se puede ampliar la capacidad del cerebro para realizar las tareas cotidianas y las conexiones de las neuronas, mediante la llamada gimnasia cerebral. Estas son algunas propuestas que cada uno puede ajustar a sus posibilidades y empezar de a poco con algunas.

1. Bañarse con los ojos cerrados. Sólo con el tacto, localizar las llaves de agua, ajustar la temperatura del agua, buscar el jabón, o el champú. Verá cómo las manos notarán texturas que nunca antes habían percibido.

2. Usar la mano no dominante. Coma, escriba, abra la pasta dentífrica, lávese los dientes, abra el cajón con la mano que más trabajo le cueste usar. Péinese, báñese píntese, aféitese, lave los

dientes con su mano no dominante.

3. Leer en voz alta. Se activan distintos circuitos que los que usa para leer en silencio.

4. Cambiar sus rutas. Tome diferentes caminos para ir al trabajo, a su casa.

5. Cambiar sus rutinas. Haga cosas diferentes. Fuércese a salir, conocer y charlar con personas de diferentes edades, trabajos e ideologías.

6. Experimentar lo inesperado. Use las escaleras en lugar del ascensor. Salga al campo, camínelo, huélalo.

Al saber dónde está todo, el cerebro ya construyó un mapa. Por

ejemplo, cambie el lugar del cesto de la basura; verá la cantidad de veces que tirará el papel al viejo lugar.

7. Aprender algo nuevo. Cualquier cosa puede servir, aprenda fotografía, cocina, yoga, estudie un nuevo idioma. Si le gusta, arme rompecabezas, tápese un ojo para que pierda la percepción de la profundidad, por lo que el cerebro tendrá que confiar en otras vías.

8. Identificar las monedas. Ponga en su coche una taza con varias monedas diferentes y téngalas a

mano para que, mientras esté esperando en el semáforo, con los dedos trate de identificar la denominación de cada una.

9.Cambiar el mouse de la computadora al lado contrario de donde lo usa comúnmente.

Beneficios de la gimnasia cerebral

La gimnasia cerebral se puede practicar a partir de los cinco años de edad. Los ejercicios de gimnasia cerebral son aptos para personas con déficit de atención, síndrome de Down, hiperactividad, Alzheimer y aquellos catalogados como emocionalmente incapacitados.
El practicar este tipo de ejercicios mejora el aprendizaje, incrementa la memoria, ayuda en la mejora de ideas, promueve la creatividad, estimula el cerebro y el sistema nervioso.
Algunos de los beneficios que se obtienen con la gimnasia cerebral son:
• En niños y jóvenes de cinco a veinticinco años: mejora atención, concentración, memoria, dislexia (dificultad para escribir, confundir letras), integrarse mejor con compañeros y mejora relaciones con padres, profesores.
• En adultos de entre veintiséis y treinta y cinco años: los beneficios de la etapa anterior además de ayudar a tener confianza en entrevistas, hablar en público con seguridad y soltura, mejorar relaciones con jefes y parejas.
• En adultos de entre treinta y seis a sesenta y cinco años: les sirve para mejorar en algún aspecto de su persona, además de los beneficios de las etapas anteriores.
• En personas de tercera edad a quienes el estrés merma sus facultades, recupera y refuerza: motricidad, pérdida de memoria, y ligera dislalia (dificultad para hablar.)

Fuente: DocSalud