Las enfermedades ginecológicas que aparecen en la menopausia
Cuando la mujer deja de menstruar y pierde su capacidad reproductiva, muchos cambios se producen en su cuerpo, algunos de los cuales pueden derivar en ciertas patologías. Cuáles son las más comunes y cómo prevenirlas.
Durante la menopausia, las mujeres experimentan un brusco descenso de los niveles de estrógenos. Por eso, tanto en este período como después pueden aparecer las siguientes patologías no oncológicas:
– Problemas en la vagina y vejiga: La disminución del estrógeno puede causar sequedad en el área genital, dolor durante las relaciones sexuales y ardor al orinar; así como un aumento de las infecciones vaginales o urinarias.
La sequedad y la atrofia vulvo-vaginal es una dolencia crónica y progresiva que afecta a casi un 80% de las mujeres post-menopáusicas. “La principal causa de sequedad es el descenso de estrógenos, pero existen otras enfermedades o medicamentos que también pueden producirla, afectando a un grupo importantísimo de pacientes jóvenes”, indica el doctor Leonardo Imbriano, médico ginecólogo.
Estos problemas pueden tratarse con una nueva técnica, totalmente inocua, que consiste en la utilización de Factores de Crecimiento del Plasma Rico en Plaquetas. Según Imbriano, “estos factores buscan activar los fibroblastos responsables de la síntesis de los componentes normales de la piel y mucosas jóvenes, factores indispensables para mantener la lubricación, el trofismo y la estructura de los tejidos”.
– Alteraciones a nivel genital: El paso del tiempo produce la pérdida generalizada de colágeno en todo el cuerpo, y eso también tiene consecuencias en el área genital, donde se producen cambios a nivel de los labios menores, mayores y en el canal vaginal, lo que genera no sólo una alteración estética, sino que también afecta la sexualidad.
Otro cambio indeseable puede ser la retracción de la cicatriz de la episiotomía, que genera dolor durante las relaciones sexuales. El oscurecimiento del área genital o la acumulación de grasa a nivel del Monte de Venus (pubis) también son algunas de las alteraciones de esta zona que pueden producir incomodidad al usar pantalones ajustados.
Para estas situaciones, existen procedimientos mínimamente invasivos como la plástica de episiotomía, el blanqueamiento genital con láser o la ‘minilipo’ de Monte de Venus.
– Prolapso de órganos pélvicos. El descenso de los órganos pélvicos (vejiga, útero y recto) se produce debido al debilitamiento de la musculatura de soporte del suelo pélvico. Asimismo, suele ser más habitual en pacientes que han tenido partos vaginales de bebés muy grandes. Aunque la mayoría de las pacientes no sienten síntomas, la queja principal es la sensación de un cuerpo extraño en el canal vaginal.
Al respecto, Imbriano comenta que “existen procedimientos mínimamente invasivos que permiten cambiar esta sensación y además solucionar la incomodidad que provoca la incontinencia urinaria. Lo recomendable siempre es consultar a su ginecólogo de confianza para que le indique el mejor tratamiento para usted”.
Medidas de prevención
De acuerdo con el doctor Imbriano, “hay cambios que no se pueden evitar, sobre todo aquellos vinculados al paso del tiempo, por ejemplo la sequedad vaginal o el prolapso”. Sin embargo, es importante cumplir con todos los chequeos de rutina, como el papanicolau y la colposcopia, que deben realizarse una vez por año. Las ecografías también deben efectuarse de forma anual, después de los 40 años, al igual que las mamografías.
Por otra parte, es fundamental que las mujeres después de la menopausia tengan en cuenta las siguientes recomendaciones:
Llevar una dieta saludable, baja en grasa, con suficiente frutas, vegetales y alimentos integrales, así como con todas las vitaminas y minerales importantes.
Mantener un peso ideal.
No fumar.
Hacer ejercicios aeróbicos (caminar, trotar o bailar) tres veces por semana. También agregar peso en las rutinas, ya que esto permite tener huesos saludables y un corazón sano.
No vestir pantalones ajustados ni ropa interior que no sea de algodón durante largos periodos de tiempo.
Recuerde que la higienización excesiva de la zona vaginal aumenta los riesgos de infecciones.
Además de los exámenes ginecológicos comunes (papanicolau, mamografía, etc.), también debe hacerse exámenes para detectar cáncer de colon y recto.
Fuente: DocSalud