Ley para prevenir la mala praxis médica
“Las leyes actuales sólo son para el ‘después’; son penas por homicidio, cuando ya ocurrió la pérdida de lo más amado. Necesitamos llegar al ‘antes’”. La frase es de Graciela Covelli, impulsora de una ley para prevenir la mala praxis médica. La llamada ley Nicolás, en homenaje a su hijo, víctima de una meningitis bacteriana diagnosticada como alergia. La normativa se aprobó por unanimidad en Diputados pero hace nueve meses está trabada en el Senado por una puja política. Pronto podría perder estado parlamentario.
El plazo final para que la ley no caiga es febrero de 2025. A partir de que se logre el dictamen en las comisiones correspondientes (la de Salud, cabecera para este proyecto, y la de Legislación General), el plazo para que sea tratada (con mayoría simple) en el recinto es de solo una semana. Pasado ese plazo, puede tratarse sobre tablas, pero entonces se requerirá el acuerdo de una mayoría especial.
Es cierto que todavía faltan seis meses para febrero y que todo puede destrabarse, pero la comisión de Salud ni siquiera está constituida (más detalles, abajo) y sería muy raro que una comisión arrancara a revisar, en pleno verano, un proyecto de cero, salvo que ya lo hubieran estado tratando durante el año.
En otras palabras, el proyecto debería entrar a comisiones antes de diciembre, cuando finaliza la actividad ordinaria del Congreso
El capítulo que nos ocupa es nombrado en el mundo como «seguridad del paciente«. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año mueren en el mundo unas 3.000.000 de personas por eventos relacionados a la inseguridad del paciente. Además, 1 de cada 10 personas sufre daños de este tipo en las internaciones. La mitad de todos estos casos se consideran evitables.
Si la ley pierde estado parlamentario, los familiares de las víctimas de la mala seguridad del paciente en Argentina deberán (como hicieron en 2018) acercarse otra vez a algún diputado piola (en este caso había sido el radical Fabio Quetglas) y tener la suerte de que la persona tenga la voluntad para: 1) Escucharlos e interesarse en el tema; 2) investigar la materia a fondo, 3) redactar un proyecto de ley, 4) consensuar con las (temerosas de una persecución por mala praxis) sociedades que representan a los profesionales de la salud, 5) consensuar con la oposición política, 6) hacer concesiones y modificar al texto, y 7) lograr que el Congreso lo vote.
El propio concepto de seguridad del paciente no es nada viejo. Germinó a medida que se amplió el horizonte de posibilidades clínicas porque, a más opciones de tratamientos, más eventos adversos.
Esto es –enumeró Ezequiel García Elorrio, médico clínico del Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria (IECS) y miembro Observatorio Argentino de Seguridad del Paciente–, “infecciones asociadas al cuidado de la salud, errores en la medicación, eventos adversos asociados a cirugías y error en los diagnósticos”, por mencionar los más frecuentes.
“Pero es mucho más que eso”, sumó el médico, y dijo: “Esta ley no es solo para los pacientes, sino para generar entornos de trabajo más seguros para los profesionales de la salud y evitar que ellos mismos queden involucrados en eventos adversos prevenibles”.
“La seguridad del paciente no es una disciplina persecutoria del profesional de la salud sino que busca crear entornos más seguros para los que trabajan ahí”, subrayó.
Qué es la seguridad del paciente
Una cosa es que un médico se equivoque en un diagnóstico e indique un tratamiento erróneo o que un enfermero administre un suero equivocado y otra cosa es que lo anterior ocurra porque esos profesionales están sin dormir por un exceso de guardias, o que deban lidiar con una falta de mantenimiento en los equipos de diagnóstico, con deficiencias en la organización de los insumos por falta de personal o con problemas variados de infraestructura hospitalaria. Todo esto hace a la seguridad del paciente.
Según datos de la OMS, hasta un 12% de los daños por inseguridad del paciente provocan discapacidad permanente o la muerte. En Argentina, cerca del 16% de los pacientes internados termina con úlceras en la piel por la presión del estado de reposo.Una de cada 10 personas sufre daños relacionados a la falta de seguridad del paciente en las internaciones. Foto Archivo / Guillermo Rodríguez Adami
Se tome la cifra que se tome, la cuestión es que la mitad de los daños provocados por la atención médica “insegura” son prevenibles, resumió García Elorrio.
Mala praxis: los 5 puntos de la ley de seguridad del paciente
En Argentina hay una ley redactada y podría ser la primera de su tipo en la región. Algunos de los temas centrales de ese texto son los siguientes
- 1. Informe sectorial
Según la ley, cada dos años el Ministerio de Salud debería emitir un diagnóstico del sistema de salud argentino. El informe, que deberá consignar las condiciones de la práctica sanitaria en todo el país, deberá incluir todos los aspectos relevantes respecto al cumplimiento de las pautas de buena práctica profesional.
- 2. Certificación periódica y verificación profesional
El texto establece que en el marco del Consejo Federal de Salud (Cofesa) se establezca un marco de estándares mínimos “que garanticen procesos de certificación del compromiso con la calidad de las instituciones proveedoras de los servicios de salud, alineados con los objetivos de calidad y seguridad de la atención previstos en la presente ley”.
Además, deberá existir una “verificación periódica de la aptitud profesional del equipo de salud. Este requisito sera aplicable en los plazos que se determinen por la vía reglamentaria”.
- 3. Registro Único de Eventos Centinela (Rudec)
La ley dispone que haya un método que –en forma confidencial– asegure la investigación de las causas que produjeron los incidentes de seguridad, eventos adversos y eventos centinela (es decir, situaciones inéditas que ameriten ser reportadas), no con un criterio punitivo sino para garantizar que se adopten medidas que eviten su repetición y garanticen el aprendizaje.
En este marco, se establece la creación del Rudec como un espacio de reporte de esos eventos, sistema que deberá garantizar la confidencialidad de la información obtenida.
- 4. Quejas, necesidades y condiciones laborales
La ley pone énfasis en que deben establecerse mecanismos para que los usuarios puedan presentar “quejas u objeciones sobre carencias y deficiencias en la prestación del servicio, sin temor a represalias”.
Además, “asegurar una dotación de personal de salud que satisfaga las necesidades del servicio y el bienestar del personal”, instaurar una duración de turnos y horas de trabajo del personal, que «eviten su agotamiento físico o mental”, y “prever medidas de protección del personal para salvaguardarlos de toda violencia o intimidación ejercidas por razón de su labor”.
- 5. Registro Unificado de Sanciones e Inhabilitaciones
Se busca ordenar el histórico problema de los profesionales que se mudan de provincia para poder ejercer, cuando su matrícula fue suspendida en su jurisdicción de origen.
Según el texto, “las autoridades encargadas del control del ejercicio profesional de las y los profesionales de la salud deben informar la adopción de medidas disciplinarias a la Red Federal de Registros de Profesionales de la Salud (Refeps)”.
Por qué el Senado tiene trabado el proyecto
Desde el último recambio legislativo –en diciembre de 2023– surgieron pujas con respecto a la distribución de miembros que irían a parar a las distintas comisiones. Son grupos de trabajo que –nada menos– se ocupan de rechazar, tratar y/o mejorar los proyectos de ley que luego se votan en el recinto.
Sectores del kirchnerismo reclaman que, al tener la primera minoría del Senado, deberían encabezar ciertas comisiones y tener cierto número de miembros en cada una. Denuncian que el oficialismo “montó” una nueva mayoría de senadores, con aliados y semialiados aquí y allá, que les permitió desplazarlos en el sentido descripto.
A modo de protesta por la situación –para ellos– injusta, el kirchnerismo se viene negando a dar quorum para constituir casi todas las comisiones que no estuvieron afectadas por el tratamiento de la ley Bases.
Para el oficialismo, al revés, el kirchnerismo está bloqueando la posibilidad de que esas comisiones se conformen y traten proyectos. Como sea, una de las que se encuentra no constituida y con proyectos de ley tejiendo y destejiendo es la de Salud.
El día mundial de la seguridad del paciente
Como todo está varado, “los familiares ya están organizando marchas en distintos puntos del país para reclamar el 17 de septiembre, que es el día mundial de la seguridad del paciente”, contó el diputado Fabio Quetglas, autor del proyecto, a Clarín.
Se mostró preocupado por los tiempos del Senado para tratar esta ley: “Esperamos que se constituyan las comisiones a tiempo para que no pierda estado parlamentario. Es cierto que si no se conforman se podría apelar al recurso del ‘apartamiento de reglamento’ y tratarse sobre tablas, pero no es lo ideal porque cuando un tema va al recinto sin pasar por comisiones es porque se trata de una urgencia, sin contar que en el estudio que se hace dentro de la comisión siempre se hacen retoques beneficiosos a los proyectos”.
Nicolás murió en noviembre de 2017 y su mamá, Graciela Covelli, corta clavos para que la ley por la que tanto peleó, salga. Habló de “dolores insoportables” en la que para ella es una “lucha inclaudicable”.
“El proyecto de la ley Nicolás es modelo en toda América, y nos están esperando para replicarla en otros países. Estoy convencida de que seremos el primer país en tener esta ley porque los ciudadanos ya alzaron su voz”, opinó.
“¿Qué les diría a los senadores, si los tuviera delante? Primero, esta cifra de la OMS de 2019: en 1 minuto mueren 5 personas por fallas del sistema de salud”, apuntó Covelli, y cerró: “Les diría que está en sus manos evitar daños y muertes evitables. Deseo que el amor y la conciencia les ganen a los egos y a los partidismos políticos”.
Fuente: https://www.clarin.com/sociedad/pelea-politica-senado-traba-ley-puede-prevenir-casos-mala-praxis-secuelas-tratamientos-medicos_0_VCrpimsfIa.html