¿Un futbolista profesional puede tener asma?

Las personas con asma pueden practicar deporte sin problema. Sin embargo, el ejercicio intenso que requiere disciplinas como el fútbol genera dudas de hasta qué punto esta enfermedad puede afectar al rendimiento deportivo. 

  1. Alicia Cruz Acal

El asma es una enfermedad respiratoria cuya prevalencia va en aumento a nivel mundial, afectando aproximadamente a 340 millones de personas en la actualidad. Debido a los síntomas que genera (dificultad para respirar o tos, entre otros muchos), se puede pensar que la actividad física y esta enfermedad nunca pueden ir de la mano. Lo cierto es que no solo no ocurre nada si se practica deporte en estos casos, sino que es más que aconsejable. De acuerdo, el asma no es excusa para no realizar ejercicio físico, pero, ¿se puede llegar a ser estrella del fútbol? 

La respuesta gráfica es David Beckham. El que fue centrocampista del Manchester United reconoció en su momento sufrir un grado leve de esta enfermedad desde su niñez. La respuesta médica la aporta Concepció Cañete, neumóloga y coordinadora del grupo de trabajo sobre asma de la Sociedad Catalana de Neumología (SOCAP).

‘‘La práctica de deporte es beneficiosa para la salud en general y eso no es diferente en las personas que padecen asma’’, aclara la experta a CuídatePlus, quien explica que, además de ayudar a luchar contra la obesidad (uno de los factores que se relaciona con un peor control de la patología), el entrenamiento favorece el fortalecimiento de los músculos y el aumento de la tolerancia al esfuerzo. Por todo ello, ‘‘mantener una actividad física adecuada y practicar deporte forma parte de los consejos proporcionados en los programas de educación del paciente asmático’’, insiste.

En el caso concreto de los futbolistas profesionales, Cañete subraya que el asma es una afección frecuente entre los deportistas de élite. En este sentido, entre un 8 y un 12% de los deportistas que compitieron en los Juegos Olímpicos de Barcelona de 1992 eran asmáticos (entre ellos, 22 participantes españoles de diversas disciplinas). ‘‘El fútbol no es una excepción. Quizás el caso más conocido es el de Beckham, al que se había llegado a ver haciendo uso de sus inhaladores durante algún partido’’. 

¿Cómo afecta el asma al rendimiento deportivo?

un futbolista tose

Es cierto que el ejercicio físico intenso puede desencadenar la aparición de síntomas característicos del asma, como la tos, la dificultad respiratoria y sibilancias debido a la deshidratación y enfriamiento de la mucosa respiratoria. Sin embargo, la neumóloga comenta que con el tratamiento y seguimiento médico adecuados se puede controlar sin mayores problemas.

‘‘Los deportes de resistencia y aquellos que requieren un gasto energético durante un periodo de tiempo prolongado, como es el caso del fútbol, no están entre los más recomendados, pero pueden perfectamente practicarse siempre que se tengan en cuenta algunas precauciones importantes’’, detalla. 

Sobre estos cuidados, la especialista alude a los siguientes:

  • El asma debe estar controlado. Para ello, es importante siempre seguir las recomendaciones del médico. 
     
  • Hay que tener una buena adherencia terapéutica, es decir, que el paciente cumpla con el tratamiento indicado por el profesional sanitario.
     
  • El deportista debe conocer las situaciones que le pueden empeorar el asma y detectarlas a tiempo para que no desencadene una crisis. El periodo de calentamiento previo al partido es incluso más importante que para los compañeros de equipo.
     
  • Los compañeros y el entrenador tienen que conocer que el deportista padece asma para saber cómo actuar en caso de que aparezcan síntomas.

¿Y si se produce un ataque de asma en pleno partido?

El ejercicio intenso aumenta las probabilidades de sufrir una crisis asmática. Si esto ocurriera durante el transcurso de un partido, Cañete manifiesta que puede bastar con hacer un descanso y tomar la prescripción prescrita por el médico

Eso sí, en caso de que estos síntomas no desaparezcan con el tratamiento o sean más severos, el futbolista ‘‘debe cesar totalmente el ejercicio y recibir atención médica’’, concluye la experta. 

Fuente: cuidate plus